En 1901 tuvo lugar la inauguración de una moderna destilería en el pueblo de Udalla, entidad perteneciente al municipio de Ampuero. Su promotor, Baldomero Landa, presidía el consejo de Administración de la Sociedad Anónima: Destilería Santa Marina.
La destiladora se instaló en un
edificio de nueva construcción de tres plantas y en un edificio anexo que alojaba
la caldera de vapor, sistema Field, de 15 HP de potencia. El vapor era
conducido a través de una tubería de hierro hasta la planta baja del edificio
principal donde se encontraban los destiladores.
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Vista de la destiladora. A la derecha sala de la caldera |
Estos en número de dos eran de cobre pertenecientes al sistema Egrot, cuyo anisador lleva en su interior un saquito o redecilla colgado de un gancho que lleva la tapadera, que contenía el anís. En esta misma sala se encontraban los filtros y las pipas para almacenar el producto.
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Sala de destilación |
Contigua a esta sala, se encontraba
otra que alojaba un motor de 4 HP para mover la transmisión que a su vez moverían
las máquinas para embotellar y encorchar, la maquinaria para fabricar agua de
Seltz, por el método Mondollot, para el carbonatado de las aguas. Esta agua
carbonatada se envasaba en botellas de pito.
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Sala de embotellado y encorchado |
El agua utilizada en los procesos
de destillado y para su carbonatado era obtenido de un manantial, alejado de la
fábrica, ubicado en la Peña Rubrillo.
En el primer piso se encapsulaban
las botellas, se etiquetaban y se guardaban en cajas. En este piso también se encontraba un pequeño
laboratorio para pruebas y las oficinas generales. El siguiente piso y último
se encontraba el almacén de materias primas y de los productos elaborados. La
comunicación entre pisos para mover mercancías se hacía a través de ascensores.
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Sala expositor-almacén |
La capacidad instalada podía alcanzar los 4.000 litros día de destilados y los 6.000 litros de agua carbonatadas, también al día. El primer director de la fabrica fue Aurelio González.
Tuvieron una política comercial muy agresiva con inserción de anuncios periódicos hasta 1933 en los diarios de una veintena de provincias; todas las del norte, más Valencia, Murcia, Melilla, Zaragoza, Ávila y Barcelona. Su eslogan más conocido era:Pedid anís Udalla.
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Cartón de propaganda del anís y detalle de la etiqueta |
Incluso lo hizo en semanarios locales como El Avisador de Santoña, El Cadagua de Valmaseda o en la Voz de Liébana de Potes. Internacionalmente lo hacía en El Mercurio, una revista Comercial Hispano Americana, en La Montaña, la revista semanal de la colonia montañesa en Cuba, donde tenía representante fijo o en El Diario de la Marina, de la Habana.
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Anuncio en el Diario de la Marina de Cuba, en 1922 |
Asistía a ferias comerciales con stand propio donde recibió múltiples medallas. Por ejemplo, el coñac Udalla, elaborado con vinos selectos de Jerez de la Frontera, había recibido cinco condecoraciones, tal como recoge su etiqueta.
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Etiqueta del coñac Udalla con sus medallas conseguidas |
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Collage con las etiquetas de la ginebra, el whisky y el aperitivo. |
Fue una destiladora de notable éxito, cerrándose en la década de 1970. En Udalla se conservan todavía algunos inmuebles de lo que fue la empresa.
NOTAS:
- Las imágenes de las instalaciones
han sido capturadas del periódico El Cantábrico nº 2.390 del 27 de noviembre de
1901.
- Los modelos de las etiquetas de
sus productos se han bajado de los respectivos Boletines Oficiales de la Propiedad
Industrial en: https://spain.iprgazettes.org/
- Los anuncios de los productos se
han obtenido en la web de la Biblioteca Virtual de la Prensa Histórica en:
https://prensahistorica.mcu.es/es/consulta/resultados_ocr.do