Se conocía como Industrias
La Sara una empresa dedicada a la fabricación de galletas, bizcochos,
caramelos, bombones, grageas, peladillas y pastillas de café y leche. Se
ubicaba en El Astillero, inicialmente en la calle Prosperidad de Guarnizo para,
más tarde, trasladarse a la calle Bernardo Lavín no 16.
Instalaciones de La Sara |
Su propietario era el empresario soriano Cayetano Manchado Muñoz, que hizo fortuna en Uruguay y el
nombre de la sociedad lo toma de una de sus hijas.
Sus comienzos tienen
lugar en la década de los años 30 y se centran en la elaboración de rosquillas,
cocadas y posteriormente galletas para lo cual registra en el Boletín Oficial
de la Propiedad Industrial, un buen número de modelos y marcas.
Modelos de galletas registradas en 1963 y 1960, respectivamente |
La fabricación de caramelos se inicia más tarde, en 1949, mediante la compra de la fábrica de caramelos de José Mira Marañón que tenía en la calle Fernández de Isla no 7 de la capital, que los comercializaba con la marca La Raquel. Su logotipo era un árbol de Noel y en su parte baja el nombre. Estos caramelos gozaban de mucho prestigio en la ciudad.
Envoltorio caramelo, marca La Raquel |
Así el 10 de octubre de ese año la delegación de Industria firma la autorización para el traslado de la maquinaria desde la calle Fernández de Isla a El Astillero.
Cuando las
instalaciones de Guarnizo se les quedan pequeñas deciden trasladarse a la nueva
fábrica que se ubica en la calle de Bernardo Lavín, 16, en la denominada finca
de "La Farruca".
Estas instalaciones a
partir de los años 60 son ampliadas, uniendo a la parte original un edificio de
arquitectura industrial acristalada, muy moderno, construido en pendiente, de
dos y tres alturas, con una especie de visera en forma de ángulo sobresaliente del
edificio, que lo hacía muy atractivo.
Vista aérea y perspectiva del edificio ampliado. |
En esta nueva ampliación
de tres plantas, la superior se dedicó a la administración y a la fabricación
del caramelo, la segunda a la fabricación de la galleta, siendo la planta
inferior y sótano la que se dedicó al almacenaje de las materias primas.
El propietario
fallece en 1959 y su hijo Alberto Manchado Cortina se pone al frente de la
industria. En este año llegan a un acuerdo con una empresa francesa para
fabricar goma de mascar o chicle, que se comercializa como Chewing Gum MAY
y la fábrica se denominará MAY Española. Operaba en las mismas instalaciones, pero era
una segunda empresa con un NIF diferente.
Registro en el BOPI nº 1771, año 1959 |
En los primeros años registran
en los boletines de la propiedad industrial un buen número de marcas que darán lugar
a multitud de chicles de sabores diferentes y diversas presentaciones.
Tarjeta de presentación de la fábrica de chicles |
Centrándonos en la
fabrica de caramelos y galletas, en 1972, declaran fabricar 346 toneladas de
caramelo y 866 de galletas al año. Para ello utilizaban la siguiente materia prima:
-Harina. 616 toneladas.
-Azúcar. 369 toneladas.
-Margarina. 89 toneladas.
-Glucosa
y varios. 167 toneladas.
-Harina
de arroz. 12,5 toneladas.
Su
parque de maquinaria era muy moderno. Para la fabricación de caramelo se nutría
en una buena parte de la casa alemana Hansella, líder mundial en este tipo de
fabricados, todavía en vigor: https://www.rotzingergroup.com/company/our-group-members/hansella. Estas máquinas eran la rodadora, la troqueladora y el pirulier y para las cortadoras y envolvedoras
maquinaria de la marca Rose.
Para
la fabricación de galletas disponía de 5 amasadoras de 100 kg. cada una, 4 batidoras
de 10 litros, marca TURU, una instalación completa, marca RATTI, para
fabricación de galletas compuesta por horno, rellenadora y cortadora, un segundo
horno continuo, marca MASVIDAL, un tercer horno continuo, marca IPSA, un cuarto
horno, doble, continuo de cadenas, envolvedoras y cámaras frigoríficas.
Estamos,
pues, ante una fábrica pequeña, pero moderna. En ese año trabajan entre las dos
secciones 56 trabajadores de los cuales 49 eran obreros y el resto se repartían
entre directivos, técnicos y administrativos.
La gama de productos
era inmensa. Así en galletas registraron cantidad de marcas como: María, Chati,
Any, Ñaqui, Petit Beurre, Duquesa, Tostada, Atlántica, galleta de vainilla, bizcochos La Sara, pastas Montañesas, galletas rellenas de chocolate, de nata, de
limón, de coco, galletitas para aperitivo, rosquillas, cocadas, obleas,
barquillos….
Existe una imagen que
se hizo muy famosa que representa a una montañesa con su traje típico, cuya
cara es una galleta María y, a modo de cuerno de la abundancia, se van desparramando
algunos de los productos fabricados, tanto de caramelos como de galletas.
Famosa propaganda de productos La Sara |
Entró en crisis a finales de la década de los 70, fundamentada en una escasez de materias primas y en un descenso del consumo de productos elaborados, lo que dio paso al cierre de las actividades y a la formación de una nueva empresa denominada: Confiberia Ibérica de Confitería donde ya aparece Juan Antonio Galarza Manchado, nieto de Cayetano e hijo de Sara.
Registro en el BOPI de la nueva sociedad. Año 1979. |
Esta última, que dio nombre a la sociedad y a una buena parte de los productos elaborados, falleció en el 2007 y está enterrada en el panteón familiar del cementerio de Guarnizo.
BIBLIOGRAFÍA
- Blog: mi Astillero. Entrada: https://astillero-guarnizo.blogspot.com/2013/05/la-sara.html
- Boletines de la
Propiedad Industrial nºs 1.753, 1.963 y 1.979 correspondientes a los años 1960,
1963 y 1979, en https://spain.iprgazettes.org/
- Archivo Histórico
Provincial de Santander. Fondo de Industria. Sección de bajas. Caja 130. Expediente 919